Oda a los hij@s de P***

Me niego a empezar el año diciendo palabrotas. Así que voy hablar de hij@s de Perkins que queda mucho más fino.



Dicen los manuales de psicología que para empezar de cero hay que hacer limpieza interior. Menuda excusa me han dado para escribir un post de "me voy a cagar en todo lo que se menea"Así que antes de hacer una lista con mis propósitos de Año Nuevo, voy a vomitar un ranking de hij@s de Perkins

Gentecilla de la oficina
Vuelves de vacaciones y te encuentras con esos seres demoníacos con los que compartes la mayor parte de los días laborables. Además, serán casualidades de la vida, pero muchos de est@os hij@s de Perkins acostumbran a estar por encima nuestro en la jerarquía. De ahí, el gustazo de bautizarlos como gentecilla (aunque yo sea más de la palabra gentuza).


¿Qué hacer? Conozco sólo dos fórmulas: o te lo tomas con humor y filosofía, o te largas del trabajo. Apuesto por la segunda, que no siempre es posible ni tampoco automática. 

Así que, mientras tanto, ¿qué os parece hacer correos de respuesta cagándonos en todo? Eso sí, correos que nunca (y recalco el nunca) vamos a enviar. Otra opción es crear un Club de Víctimas porque ya dicen que Mal de muchos, consuelo… aunque sea de tontos. 


No soy machista ni feminista, soy persona
¡Aaaaahhrrrrgggg! A ver hij@s de Perkins coger un diccionario, por favor, y leer las definiciones de feminismo y machismo. ¿Pilláis que no son términos equivalentes?

Que conste que no me gusta criticar la ignorancia, en todo caso combatirla. Pero la verdad es que l@s Perkins que se ponen a filosofar sobre el feminismo, no tienen esa misma afición con la física cuántica. ¿Por qué? Tengo respuesta: el feminismo se ha convertido en un tema cuñao porque ataca las bases de nuestra sociedad y hay quién lo siente como una amenaza. 


Fans del ‘ghosting’
Hay gente con la que tienes una relación (que puede ser simplemente de amistad)de pronto hace mutis por el foro. Y en el mejor de los casos, te deja con el doble tic azul del Whats. Mi experiencia es mayoritariamente con hijos de Perkins, pero supongo que, como las meygas, de Hijas que se esfuman como si nada, “habelas hailas”. 

¡Con lo bonito que sería que fuéramos todas y todos fans del Gosling...y no del ghosting! Un chiste facilón que me sirve de excusa para poner un GIF de Ryan.


Este nuevo “me voy a comprar tabaco” es muy cruel aunque ya nos hayamos acostumbrado a que la gente no nos conteste nada. Es el castigo del silencio que tan bien explica Marina Pinilla


Aprendices de artes adivinatorias
Hablaré en primer lugar de Los Pitonisos. Una nueva especie de Homo Sapiens del género masculino que hemos detectado mis amigas y yo. Básicamente, son tíos que casi no conoces (ni te conocen, aunque te los hayas empotrado) pero saben perfectamente cuál será tu comportamiento futuro. Y sólo ven dos opciones: 
  • Les vas pedir matrimonio o ser el padre de tus hijos (aunque tengas familia numerosa). 
  • Eres una guarrilla y, por lo tanto, te pueden hacer un ghosting, un benching o un zombing (de los dos últimos hablo otro día).
Y qué me decís de las hijas de Perkins autoconsejeras que, al parecer, también vienen equipadas con una bola de cristal de serie. Suscriben frases como “La maternidad es una experiencia que no te puedes perder”, “Ya es hora de ir sentando la cabeza” o “¿Has probado con un entrenador personal?”. Pues no, y ni falta que me hace.



¿Perfección? Sí, yo mismamente
Quien no ha tenido que compartir espacio (o lo que es peor, viaje) con Perkins sabelotodos.¿Habláis inglés? Ni se te ocurra hacerlo delante de ell@s que te corregirán sin dudarlo (aunque no tengan más idea que tú). ¿Hay que hacer planes? Los suyos, sin lugar a duda, porque no aceptan los de los demás. Eso sí, ponte tapones para no oír las quejas de que siempre se encargan de todo. 


Y prepárate porque el día que te dejen hacer algo y no salga a su gusto (que no va a salir), te van a someter a una especie de interrogatorio policial para ver qué hiciste mal. Después te obsequiarán con un cursillo de Cómo hacer las cosas perfectas como yo... básicamente para que no vuelvas a cagarla. ¡Su generosidad no tiene límites!

Los empaquetadores de tangas del H&M
Esos hij@s de Perkins hacen que ir a comprar bragas sea una actividad de riesgo. Las empaquetan de 3 en 3, cosidas con un hilo casi imperceptible que como te descuides ya les has hecho un agujero antes de estrenarlas. No necesitas esperar a una noche pasión para gritar: "Rómpeme las bragas". Qué va, lo haces tu misma para poder ponértelas.

Y qué me decís de las etiquetas. ¡Si son más grandes que el tanga!. A coger otra vez las tijeras e intentar que el tanga salga ileso.

Pero lo peor aún está por llegar. Los empaquetadores del H&M hacen que el pack de bragas parezca un cinturón de castidad. No te lo puedes probar con el agravante que no cambian la ropa interior. Ahora me diréis: ¿qué no sabes tu talla? Pues no, se me olvida. Tengo muchos post en la cabeza y pocas neuronas... Y como corto las etiquetas, me quedo sin pistas para saber si mi culo es una S, una M o una L.



Mi espacio es el tuyo
En el metro de Barcelona está en marcha una campaña contra el manspreading, que es esa manera que tienen algunos hombres de sentarse espatarrados como si no existieran personas alrededor suyo. Yo voy poco en metro porque soy del extrarradio y me toca el tren. En los Ferrocarriles, además de sufrir el manspreading, también soy víctima de todo tipo de allanamiento de mi espacio vital por parte, indistintamente, de Hijos e Hijas de Perkins.


Algunos ejemplos: La que hablando por el móvil no para de gesticular y te obliga a dejar de leer para evitar un morado en toda la cara. El que se pone el abrigo pensando que es la capa de Superman. El que se duerme y piensa que tu hombro es la almohada… Y podría continuar hasta hacer un post exclusivo de estos especímenes. 

¡Qué dura es la vida sin coche oficial!  


¿Y vosotr@s a qué Hij@s de Perkins añadirías a esta lista?

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